Me considero una persona compleja, pero con gustos sencillos. Dedicar tiempo y recursos a la actualización constante y la mejora continua es una parte esencial de mi vida. En esencia, siento una profunda pasión por la psicología y por todo lo que implica acompañar procesos humanos.
Mi trayectoria laboral se ha ido construyendo a lo largo de los años a través de experiencias diversas, cada una aportando un matiz único a mi crecimiento profesional. Esa diversidad se refleja también en mi formación, que integra tanto aspectos técnicos como humanos, y me ha enriquecido con un conocimiento integral y variado.
Mi trayectoria en la UNED ha sido un recorrido marcado por desafíos, altibajos y valiosas lecciones.
Todo comenzó hace años, a principios de este siglo, en Guadalajara, cuando intentaba compaginar mi trabajo con la Ingeniería Técnica de Sistemas. Aquella etapa resultó ser un fiasco.
El giro inesperado llegó mucho tiempo después, impulsado por el amor y el interés por la psicología. Armado de valor, decidí aventurarme en la Licenciatura de Psicología, una experiencia que dejó una huella imborrable en mi vida. Sin embargo, me vi obligado a abandonar una vez más.
Tras un largo periodo sin empleo y en medio de una etapa difícil, decidí intentarlo de nuevo. Me propuse superar las asignaturas del segundo cuatrimestre, pero a pesar de un esfuerzo sobresaliente, volví a suspender. Con la moral por los suelos, estuve a punto de rendirme. Las dificultades parecían insuperables, hasta que, casi al límite, me dije: “Dani, concédete una última oportunidad, es tu sueño”.
Hice cambios significativos: empecé a asistir a las tutorías, una de las mejores decisiones que tomé, pues recibí un apoyo excelente de los tutores.
Después de un esfuerzo titánico, ese mismo verano —aunque tuve que enfrentar alguna asignatura en septiembre— finalmente obtuve mi premio: aprobé mi primer curso completo. Fue un logro que consolidó mi perseverancia y me recordó que, a veces, la persistencia es la clave para alcanzar los sueños.
Alcanzar el segundo curso fue un logro que me llenó de ilusión, aunque pronto descubrí que se trataba de una etapa especialmente exigente. El contenido era complejo y ninguna asignatura resultaba sencilla; incluso tuve que enfrentar por segunda vez alguna materia que se había resistido en el primer intento.
De repente, la pandemia del COVID-19 irrumpió sin previo aviso, imponiendo cambios drásticos en la vida de todos. Personalmente, me detuvo por completo. Al igual que el mundo entero se paralizó, yo también lo hice. Durante semanas mi mente estuvo atrapada en el miedo, la inseguridad y la incertidumbre sobre un futuro que parecía desvanecerse.
Sin embargo, mi viaje no había terminado. Aunque cada paso costaba un gran esfuerzo, decidí no quedarme parado. Poco a poco, con dedicación y trabajo, fui dando pasos pequeños pero firmes. Caí muchas veces, cometí errores, pero siempre me levanté y volví a intentarlo.
Cada éxito y cada fracaso me aportaron algo. Con cada avance, creía un poco más en mí mismo, crecía y adquiría nuevas habilidades o refinaba las que ya tenía.
Finalmente, logré completar y cerrar otra dura etapa en este viaje hacia la realización de mi sueño, demostrando que incluso en medio de la adversidad más inesperada era posible seguir avanzando.
Llegar a tercero fue un momento de ilusión y energía. A pesar de la pandemia y de un futuro que se veía sombrío, decidí enfrentarme a las incertidumbres con determinación. Con entusiasmo y proyectos en mente, me lancé a un reto que marcaría mi trayectoria académica.
Las tutorías se convirtieron en un pilar fundamental y, armado de valor, tomé una de las decisiones más arriesgadas: ampliar la matrícula con asignaturas de cuarto, alcanzando un total de 8 en un solo cuatrimestre. Fue un período agotador, lleno de dudas y complejidades, pero también de aprendizaje.
La época de exámenes, agravada por las dificultades del Covid-19, puso a prueba mi resistencia. Sin embargo, logré aprobar todas las asignaturas del primer cuatrimestre, con una satisfacción enorme.
La segunda parte de tercero trajo un reto aún mayor: ampliar la matrícula con las asignaturas restantes de cuarto, un total de 9. Nuevamente, conseguí aprobarlas todas con buena nota.
Este logro significó superar 17 asignaturas en un mismo curso académico, equivalente a completar tercero y cuarto de forma simultánea, dejando únicamente pendientes el TFG y las prácticas. Fue un hito que celebré con gran satisfacción y que marcó un paso decisivo en mi camino, demostrando que incluso en condiciones adversas podía avanzar contra todo pronóstico.
Durante mi travesía en el máster me enfrenté a una experiencia compleja y desafiante. Cada paso fue una prueba de resistencia, una amalgama de dificultades que exigieron renuncias personales y una gran capacidad de adaptación. En medio de esa exigencia descubrí una riqueza de aprendizaje que solo se encuentra en la dificultad.
Las jornadas intensas pusieron a prueba mi capacidad de manejar el estrés y me enseñaron la importancia de la perseverancia y la dedicación. Cada obstáculo superado fortaleció mi confianza y reafirmó mi compromiso con el desarrollo profesional.
Especialmente desafiantes fueron las prácticas curriculares, seis meses de trabajo intenso que representaron un punto crucial en mi formación. Compaginarlas con otras responsabilidades y renunciar a aspectos importantes de mi vida no fue fácil, pero el sacrificio tuvo un retorno invaluable. El contacto directo con pacientes me permitió atender sus necesidades de manera tangible y recibir felicitaciones tanto de ellos como de mis colaboradores, validando mi esfuerzo y dedicación.
Enriquecedora y transformadora: así describo mi experiencia en el máster. Cada desafío, ya fuera en el aula o en la clínica, se convirtió en una oportunidad para aprender, adaptarme y crecer. Las interacciones clínicas y los momentos de reflexión personal me brindaron una visión más profunda de mi futura profesión y una comprensión más completa de mis capacidades y límites.
Aunque fue un camino duro, la recompensa fue proporcional al esfuerzo invertido. Hoy puedo afirmar con seguridad que el máster y las prácticas no solo fueron obstáculos superados, sino una travesía que dejó una marca indeleble en mi crecimiento personal y profesional.
Aún me cuesta creer que logré culminar la carrera. Recuerdo las conversaciones hasta altas horas con aquella persona que me introdujo en este fascinante mundo, los momentos difíciles de mis primeros pasos, las caídas y los esfuerzos por levantarme y seguir avanzando. Dejé muchos “pelos en la gatera”, pero también experimenté un crecimiento personal que me transformó en la versión más cercana al psicólogo que siempre soñé ser.
El final de la carrera implicó superar dos grandes desafíos que, aunque me asustaban, también me llenaron de ilusión. Al mirar atrás, confío mucho más en mis habilidades y en la certeza de que podré afrontar los retos que vengan.
Pero mi viaje no terminó ahí. Me aguardaba un reto crucial: obtener la habilitación sanitaria a través del Máster en Psicología General Sanitaria. Fue una etapa exigente, llena de renuncias y recursos personales puestos a prueba, una apuesta arriesgada que en mi caso valió la pena. La experiencia clínica durante el máster me proporcionó herramientas valiosas que me acompañarán siempre.
Tras obtener el máster, comencé a atender pacientes online y en consulta privada, poniendo en práctica lo aprendido y consolidando un espacio propio de trabajo.
Hoy me pregunto qué sucederá después. Si pudiera pedir un deseo, sería dedicarme plenamente a la psicología clínica, mi principal apuesta hasta ahora. Sé que la formación continua será esencial, y estoy dispuesto a seguir aprendiendo y creciendo.
Ahora me enfrento a un nuevo y emocionante desafío: trabajar y luchar con todo mi empeño para hacer realidad ese sueño. Independientemente de cómo se desarrolle, tengo claro que seguiré el camino que me permita contribuir y ayudar a la sociedad, mejorando la vida de quienes me rodean.
Este es, por el momento, mi viaje en el apasionante mundo de la psicología.
A lo largo de mi trayectoria he tenido la oportunidad de participar en diversos proyectos que enriquecieron mi formación y práctica profesional.
En la Universidad UNED colaboré en BOCAMA, aportando reflexiones y contenidos vinculados a la psicología. Fuera del ámbito académico, destaqué en la ONG Chomandos, donde contribuí con la redacción de varios artículos orientados a la divulgación y sensibilización psicológica.
Asimismo, participé en Growpsi, colaborando en la creación de una píldora formativa que buscaba transmitir conocimientos de manera clara y accesible.
Cada una de estas experiencias representó un espacio de aprendizaje y compromiso, y me permitió integrar la psicología en diferentes contextos, siempre con el objetivo de aportar valor y acompañar procesos de crecimiento.
UNED MADRID - El boletín del CAMA, Febrero de 2019
Estos artículos representan contribuciones desinteresadas que realicé de forma altruista en los primeros años de mi carrera. En aquel momento atravesaba una etapa especialmente desafiante, y participar en estas colaboraciones fue un apoyo importante para mí.
Al leerlos, cualquiera podrá notar que aún me encontraba en una fase temprana de aprendizaje, con errores y lagunas propias de ese momento. Sin embargo, más que simples escritos, reflejan mi disposición inicial para contribuir, aprender y crecer.
Nunca tuve la pretensión de que alcanzaran la calidad de publicaciones profesionales ni que se ajustaran a los estándares de los medios. Su verdadero valor reside en lo que simbolizan: un punto de partida en mi desarrollo personal y profesional, y una muestra de mi compromiso temprano con la psicología y con la sociedad.
Depresión y adicción a los juegos en los jóvenes
https://www.chomandos.com/depresion-y-adiccion-a-los-juegos-en-los-jovenes/
¿Te sientes deprimido cuándo cambia el tiempo?
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¿Dormir puede ayudarnos a enfrentar nuestros miedos?
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El lado oscuro del WhatsApp
¿Es bueno o malo aceptar el dolor o sufrimiento del otro?
https://www.chomandos.com/en-obras-es-bueno-o-malo-aceptar-el-dolor-o-sufrimiento-del-otro/
La pobreza y los efectos en el cerebro de los niños
https://www.chomandos.com/la-pobreza-los-efectos-cerebro-los-ninos-pruebas/
Enlace vídeo: https://youtu.be/IBnlu42rV6s
Trabajo realizado como docente en AEPSIS curso en intervención en emergencias y catástrofes